En un interesante artículo reproducido esta semana por redes sociales, el catedrático Laurent Bègue de Psicología Social en la Universidad Pierre Mèndes-France de Grenoble, se refiere al maltrato animal como a nuevo medidor que le está sirviendo a la criminología internacional para analizar la violencia extrema que puede desarrollar el ser humano en medio social.
Maltratar a un animal es en muchos casos la consecuencia de una frustración o de un trauma y es un comportamiento que se adquiere en la niñez. Se puede desarrollar también en la adolescencia. El maltrato animal nace en el seno familiar o escolar y luego por transferencias puede llegar a convertirse en un comportamiento antisocial.
El maltratado y en especial el maltrato a los animales de compañía está presente en cualquier grupo humano pues los niños como las mascotas son los primeros catalizadores de nuestras frustraciones.
Sin embargo en nuestra época el maltrato animal ha llegado a un nivel considerable de sevicia. Un ejemplo es la denuncia que hizo hace poco un colaborador en Soyperiodista.com. “Los animales sí importan” se referia el 3 de mayo al caso de un hombre en Ibagué que mató a un perro agarrándolo por la cola y estrellándolo contra el suelo.
La violencia animal es más frecuente de lo que imaginamos aunque una protección para no verla y no sufrirla sea la de tomarla como una violencia banal : “solamente son animales”.
Los actos de crueldad animal dicen mucho sobre la personalidad de quienes los cometen. La crueldad contra los animales puede ir desde los golpes hasta arrancarles la piel estando vivos (perros, gatos pequeños), sin contar la utilización sexual a la que también se les somete.
Esa relación de violencia del hombre con el animal ha impulsado a investigadores en criminología a tomarla como un medidor fiable del grado de violencia en individuos que cometieron o que pueden cometer crímenes y otros delitos graves.
Psiquiatras y expertos en Psicología social de la University of the Pacific en California, comprobaron por ejemplo que el 45 % de los autores de nueve masacres cometidas en medio escolar en Estados Unidos en los últimos veinte años, habian cometido actos de barbarie con sus animales de compañía.
El profesor Laurent Bègue cita un estudio que merece atención, es el que se realizó a raíz de la masacre en el Liceo de Columbine, Colorado, ocurrida el 20 de abril de 1999. Los criminólogos constataron que Eric Harris y Dylan Klebold, los dos estudiantes que mataron a 12 de sus compañeros de colegio y a un profesor e hirieron a 20 personas más antes de suicidarse, habían confesado alguna vez que cuando niños disfrutaban practicando mutilaciones y provocando sufrimiento en sus animales de compañía.
El Profesor Bègue se refiere a otros casos :“En un estudio retrospectivo que se realizó en una prisión con 36 autores de asesinatos, el 36% de ellos dijeron haber matado o torturado animales en su infancia y 46% haber cometido actos de crueldad durante la adolescencia. En otro estudio en medio carcelario con 180 presos, Brandy Henderson de la Universidad de Tennessee comprobó que los actos de violencia hacia los animales que declararon haber cometido los detenidos eran particularmente frecuentes”.
Tipo de maltrato que los detenidos dijeron practicar con sus mascotas y otros animales :
- ahogarlos 17,5
- pegarles 82,5
- dispararles 33,0
- darles patadas 35,9
- estrangularlos 17,5
- quemarlos 15,5
- utilizarlos para fines sexuales 22,3
La crueldad con los animales según Franck Ascione de la Universidad de Denver es un comportamiento socialmente inaceptable pues el fin del torturador es causar dolor, sufrimiento y angustia y/o muerte del animal por puro placer.
La psiquiatría permite afirmar que los actos de crueldad cometidos por un niño puede revelar su temprana predisposición para desarrollar conductas antisociales. Un niño torturador de animales es susceptible de tener problemas con la justicia cuando sea adulto.
Razones que llevan a maltratar a un animal
Los americanos Stephen Kellert y Alan Felthous de las universidades de Yale y Texas, citan ocho razones que llevan a un individuo a maltratar o a torturar a sus animales de compañía:
1- Control: el animal es golpeado para que no siga manifestando comportamientos indeseados (ladrar, saltar, jugar…)
2- Castigo: propinarle un castigo extremo para que no vuelva a repetir un hábito que molesta (ensuciar o vomitar en lugares que le son prohibídos)
3- Ausencia de respeto: Está ligado a prejuicios culturales. Es cuando una persona cree que puede maltratar a un animal o lo puede descuidar ya que su condición de inferioridad no lo hace merecedor de consideración.
4- Instrumentalización: Utilizar los animales para “teatralizar” la violencia, es el caso de los combates de perros.
5- Amplificación: el animal es utilizado para impresionar, amenazar o herir a una persona. Aquí se cumple un traspaso de la violencia del humano hacia el animal
6- La violencia como escarmiento o como ejemplo: Maltratar a un animal ante un grupo con el fin de hacer que sus miembros se conviertan en testigos de una forma de superioridad de quien maltrata. También se puede torturar por diversión
7- Venganza: Se agrede a un animal para vengarse de su propietario
8- El desplazamiento: El animal es maltratado porque la persona no tiene la posibilidad o la capacidad de maltratar a quienes le provocaron una frustración o una decepción. No puede hacerlo porque les teme o le son inalcanzables. Es el caso del empleado que espera una promoción y que al no obtenerla regresa a su hogar y le da patadas a su mascota.
El análisis del Profesor Laurent Bègue nos lleva a concluir que la tortura contra los animales nace de una mala calidad de vida. Los animales pagan nuestra dificultad para vivir, pagan por ser testigos inocentes de nuestra propia mediocridad.
Fuente: https://m.facebook.com/story.php?story_fbid=1324381117599529&id=100000829616175
Durillo, pero la triste realidad bien documentada.
ResponderEliminarLa especie humana se corresponde a un mono enfermo. Las medidas legales para regular la posesión de mascotas, son mínimas, cuando no nulas. Es intolerable.
ResponderEliminarEl día de hoy llevé a mi gato al veterinario donde me diagnostico que mi gato tenía una infección en la vía urinaria y que tenía muy inflamada la vejiga por lo cual hacía orina con sangre le inyectó 5 veces diferentes antibióticos me dijo que después de eso el gato mejoraría y me dio cita para el próximo viernes, el veterinario me comentó que no corría peligro eso fue el día de hoy a las 14:00hrs del día 29/11/2017 pero al pasar 6hrs aproximadamente mi gato empezó a convulcionary y murió en un par de minutos y de verdad que lamentable que un experto "veterinario" no tenga un diagnóstico para saber realmente cuál era el problema de mi gato.
ResponderEliminarQue puedo hacer??
No se qué decirte. Mi labor es la comunicación animal, yo transmito las respuestas o el mensaje del animal, no soy veterinario. Si te sirve de consuelo te diré que a veces el veterinario no puede hacer nada si el proyecto de vida de un animal toca a su fin. Tienen su momento marcado, de hecho hay animales que dejan de comer voluntariamente cuando sienten que se acerca la fecha en que termina su paso por este plano. No se si hubo negligencia de algún tipo, me temo que a eso no puedo contestarte así sin más, pero si te diría, aunque comprendo que sea difícil de digerir, que nada cambiaría el final de tu gato, por buen trabajo que hiciera el vete, si era "su día". Como los animales suelen transmitirme, especialmente los del otro plano: "los humanos podéis cuidar, pero no curar. No tenéis el poder de controlar eso, aunque estéis convencidos de que si. Cuando llega el momento de irse de este plano, así será... hagas lo que hagas"
EliminarNo se si es la respuesta que necesitas escuchar, pero por mi experiencia es la que yo puedo darte. Si necesitas hacer comunicación con tu gato, me tienes a tu servicio.
Te dejo un abrazo de ánimo, pues sea como sea, se lo duro que es.